Anónima ...

Palabras para una pequeña persona que tal vez, nunca podrá leerlas…porque lo más probable es que nunca exista.

Me tuviste 20 días con la ilusión en mi corazoncito…esa ilusión de que probablemente estabas cobijado en mi vientre…días de una mezcla de sentimientos, alegría, miedo, ansiedad, nerviosismo…todo esto pasaba por mi mente, por lo que creía y, para que negarlo, por lo que también sentía.

Era demasiado hermoso pensar que en mi estaba creciendo una vida, que algo tan indefenso como tú estaba en mi vientre, preparándose y preparándome para llegar a este mundo…para proteger con mi vida. Amaba la idea de tener a un pequeño saltando, gritando, riendo, llamando al hombre de mi vida PAPÁ, esa palabra tan sencilla que en la voz de un niño suena tan dulce; no me imaginaba escuchándote llamarme MAMÁ, pero sí me encantaba fantasear viendo a mi novio como tu “papi”.

Tengo sueños, y uno muy bien guardado es ser mamá, pero con el hombre que hoy tengo a mi lado; con mi primer y unico amor. Mi mayor anhelo es darle un hijo al que se supone sería tu padre; que llegues a este mundo y podamos formar una linda familia, la que esperé, la que sentí venías a comenzar o completar tu mi bebé.

Desde pequeña me dijeron que no podría tener hijos y con el tiempo esa frase me iba partiendo cada vez más el corazón; tengo claro que ni el amor de mi pareja me lo podrá reparar…porque me destroza saber que jamás vendrás a mi y sólo tú me podrás devolver la alegría, sólo tú podrás pegar cada pedazo de éste corazón.

Hoy he descubierto que esta depresión sólo tú, mí pequeño ser, la aliviarás cuando sepa que estás en mi pancita y más feliz seré cuando tu papi y yo nos digamos, contigo en los brazos, cuanto nos amamos; ese día será, definitivamente, el más feliz de toda mi vida y también, ese te amo será el más hermoso que oiré y diré.

Sólo me queda decir que te espero con ansias, me encantaría decir que te esperamos, pero no sé realmente si tu papá te querrá; pero ten por seguro que aquí YO te esperaré con todo el amor y las fuerzas necesarias y conmigo sé que nada te faltará, porque sólo por ti viviré día a día…